Al rededor de las 7 de la mañana de este lunes, en Palermo, balearon a un menor de edad. La Policía maneja la hipótesis de que se trataría de un ajuste de cuentas.
Balearon a un menor de edad en Palermo. El adolescente tiene 17 años y recibió un disparo en la madrugada de este lunes, a la salida del boliche Input, en Palermo. Tras la agresión, personal del SAME lo trasladó al hospital Fernández. La Policía de la Ciudad montó un operativo cerrojo para detener a los agresores, que escaparon en un Toyota Etios.
El suceso ocurrió cerca de las 7 de la mañana, en la puerta de Input, donde jóvenes se acercaron para disfrutar de la fiesta “La Fresa”. El tiroteo fue alertado al 911 por un testigo y personal de la Comisaría 14A se dirigió al lugar. La víctima estaba tendida en la calle y rodeada de jóvenes, que pedían auxilio.
De acuerdo a testigos presentes, el ataque ocurrió a la salida del boliche. Dos hampones armados le dispararon a la salida del local bailable, luego escaparon. La víctima poseía bolsas de cocaína y tusi. Los agresores, al revisar las cámaras de seguridad, escaparon en un Toyota Etios, que fue encontrado en un playón en la calle Iriarte al 3900, en la Villa Zavaleta.
Si bien todavía no se determinó el motivo de la causa, la principal hipótesis que maneja la Policía de la Ciudad está vinculada con las bolsas de droga que tenía el joven su haber. En el Hospital Fernández confirmaron que el adolescente de 17 años solo recibió un disparo, que le rozó el cuero cabelludo. Ingresó al centro médico lúcido al lugar y se le practicó una tomografía para descartar problemas.
El titular del SAME, Alberto Crescenti, sostuvo que la víctima “nació de nuevo” porque la bala “no ingresó al cráneo”. Además, afirmó que “por suerte la tomografía computada arroja que el impacto le hizo un sedal. La bala no ingresó a la cabeza, pero le hizo una excoriación en la piel”.
En el lugar donde balearon a un joven menor de edad en Palermo, quedaron en el asfalto manchas de sangre producto del disparo. Todavía no se logró dar con el paradero de los agresores, pero la Policía de la Ciudad los busca intensamente, además de vigilar las cámaras de seguridad de la zona.