El sábado pasado, y luego de dieciocho meses de pandemia, se realizó la Peregrinación Juvenil a la Basílica de Luján número 47°, donde miles de jóvenes, grupos de amigos y familias, con banderas de diferentes santos colgadas, barbijos y de a grupos de cinco personas, fueron caminando a Luján para pedir o agradecer.
Peregrinos de todas las edades y provenientes de distintos puntos del país, pidieron por “salud, trabajo y sus familias”, en un recorrido que comenzó a las ocho de la mañana en la Parroquia de San Cayetano, en el barrio porteño de Liniers, y se extendió unos sesenta kilómetros hasta la Basílica de Luján.
Si bien todas las dependencias municipales trabajaron en conjunto para colaborar con los caminantes a través de puestos de atención médica, hidratación, masajes y ayuda, desde la Municipalidad de Merlo se organizaron para cooperar en la peregrinación, para que, cuando la gente pase encuentre lugar con todo lo que se necesita para ser asistido.
El trabajo se realizó en conjunto con la Dirección de Culto del Municipio, en articulación con las distintas áreas del distrito como Defensa Civil, Secretaría de Salud, De Obras Públicas, Ceremonial y Protocolo, y la Secretaría de Desarrollo e Integración Social.
El Director de Culto, Paolo Cavallaro expresó: “Es importante, en estos tiempos difíciles que pasamos, tener fe sobre todo, que es lo más importante y hay mucha gente que lo necesitaba, para pedir ese milagro que tanto anhelan y era necesario que se haga la peregrinación”.
El lema de la 47ª Peregrinación Juvenil al Santuario de Luján fue “Madre del Pueblo, te pedimos por la salud y el trabajo”.